Detrás de la puerta (de Ariel Capone)

Ya desde el cartel, se enorgullecía esta obra representada en Microteatro Por Dinero, de ser, entre otras cosas, un directo y terrorífico homenaje al giallo italiano, sobre todo a Dario Argento. Para ello, el director contó con la imprescindible colaboración de su ya musa, Olivia Baglivi, y con dos grandes actores, Francisco Olmo y Ángel Savín, que se intercambiaron el personaje lleno de aristas de ese director de teatro encerrado literalmente en un sótano por su querida actriz, en un atroz acto de venganza… o eso al menos es lo que parece. Un texto retorcido y magnífico, de Ariel Capone, en el que se exploraban las fronteras del éxito, la manipulación en el arte, sus delirios y la pérdida de realidad. Todo ello derivó en un ejercicio de estilo que entroncaba a la perfección con las áreas oscuras que el director gusta explorar en su obra. De extra, la escenografía contaba con ese huis clos que la eficiente y gran escenógrafa Esther García, supo reflejar como nadie. En cada una de sus numerosas representaciones, los actores se dejaron un pedazo de ellos mismos en unas interpretaciones descarnadas, que las pelearon a muerte: ganaron, y mereció mucho la pena.